Filtros de agua para cultivos hidropónicos y el riego de plantas y jardines

EL pH ACIDO
Publicado 1 junio, 2020

El pH ácido en el agua suele ser un problema muy común para la mayoría de cultivadores. Ya que aunque el pH 7 se considera neutro (ni ácido ni alcalino), no es el pH óptimo para las aguas de riego. El rango recomendado de pH del agua de riego para el cultivo depende de la variedad que se vaya a plantar. En general, el pH correcto para el riego oscila entre 5.2 y 6.8. Si el pH de tu agua está por encima de 7, entonces estás usando agua con pH ácido y puede que necesites realizar un tratamiento previo antes de usarla. El pH es la medida de la concentración de iones de hidrógeno de una solución (cuán ácida o alcalina es) y varía de 0 (el valor más ácido) a 14 (el valor más alcalino).

En la mayoría de lugares el agua del grifo contiene cantidades sustanciales de calcio (Ca) que le otorga su característica dureza. Estos niveles de calcio pueden provocar varios problemas, los cuales pueden aliviarse realizando algún tipo de tratamiento previo del agua.

ABLANDAMIENTO DEL AGUA

Hay varios métodos para ablandar el agua y lo más seguro es mediante la utilización de un sistema de ósmosis inversa, que elimina por completo el calcio y el bicarbonato. Para la horticultura, el bicarbonato de calcio se neutraliza mejor añadiendo pequeñas cantidades de ácido concentrado al agua. La ósmosis inversa ni cambia ni altera el pH, este seguirá siendo el mismo aunque eso sí, bajará la EC eliminando la mayoría de sedimentos y sobretodo, el cloro del agua.

CONSECUENCIAS DE REGAR CON UN PH ACIDO

  • La disponibilidad de micro-nutrientes como el hierro (Fe), el manganeso (Mn), el zinc (Zn), el cobre (Cu) y el boro (B), y el crecimiento de las plantas, pueden verse reducidos drásticamente usando un valor de pH ácido.
  • Un pH ácido en el agua puede provocar que las sales que los fertilizantes contienen y con los que llenar los depósitos de almacenamiento, precipiten (cristalicen).
  • El agua con un pH ácido también puede reducir la eficacia de los insecticidas. Ya que la mayoría de ellos mantienen sus propiedades activas por más tiempo en soluciones con un pH bajo.
  • Gran parte del calcio disponible lo hace en forma de bicarbonato de calcio, que se puede precipitar tanto en el fondo de los depósitos, diferentes partes de la planta (tronco, raíces, follaje) como en diferentes herramientas (macetas, bandejas, tijeras) y accesorios (humidificadores).
  • El uso continuo de agua dura para el riego también puede llevar a una acumulación de cal en el sustrato. Es un problema propio de muchos invernaderos de temporada larga en los que la acumulación de los riegos lleva a una acumulación de un pH alto en el suelo.
  • Muchas especies de viveros son sensibles a la cal y a la acumulación del pH en el suelo, pudiendo resultar ser muy dañinos.
  • Usando agua ácida en los humidificadores puede provocar la aparición de una capa blanca en las superficies de las hojas, reduciendo la fotosíntesis.
  • También es muy típico el bloqueo de tuberías y boquillas en los sistemas de riego automáticos e hidropónicos.

 

 

LA ALCALINIDAD

La alcalinidad es la capacidad del agua para neutralizar los ácidos. Los bicarbonatos disueltos como el bicarbonato de calcio, el bicarbonato sódico y el bicarbonato de magnesio, junto con los carbonatos como el carbonato de calcio, son los principales contribuyentes a la alcalinidad en el agua de riego. La mayoría de los laboratorios asumen que el total de carbonatos (TC) es igual a la alcalinidad, pero en realidad en la mayoría de las aguas, los bicarbonatos representan mas del 90% de toda la alcalinidad presente. Para estar seguro, lo mejor es realizar un análisis de agua y ver si se muestra el total de carbonatos en porcentajes o en cifras separadas para cada elemento.

ACIDIFICACION DEL AGUA

Añadir la cantidad correcta de ácido, hará que el pH del agua se pueda reducir. Si te encuentras en una zona con agua dura y decides acidificar el agua, es posible que tengas que disminuir la cantidad de calcio de tu mezcla de cultivo para que coincida con los nuevos niveles de alcalinidad. Si baja el pH, es posible que debas aumentar el contenido de calcio.

El ácido nítrico concentrado (60%) también proporciona algo de nitrógeno (N). Por cada 100 ml de ácido nítrico concentrado que se añade a 1.000 litros de agua, se están suministrando 22 mg/l de nitrógeno. A partir de una serie de muestras de agua dura analizadas, se encontró que la cantidad de ácido necesaria varía entre 50 ml y 200 ml de ácido nítrico concentrado por cada 1.000 litros de suministro de agua.

Es esencial pues evaluar con precisión la cantidad de ácido necesaria en cada caso. Si se añade una pequeña cantidad de ácido por encima de lo requerido, el pH del agua se convertirá en muy ácido. La cantidad de ácido requerida se evalúa mejor por el proceso de valoración. Utilizando el gráfico como ejemplo, una muestra de agua que contiene 100mg/l de calcio requiere 275 ml de ácido nítrico concentrado para llevar el pH a 5.9.

NUTRIENTES A PARTIR DE ACIDOS

Aparte del ácido cítrico, algunos ácidos utilizados para la acidificación del agua también suministran nutrientes en combinación con el hidrógeno. El nutriente suministrado puede ser beneficioso para el crecimiento de las plantas (siempre que no se realice en exceso) pero también puede reaccionar con las sales contenidas en fertilizantes con una alta concentración o con pesticidas, si se mezclan en soluciones para pulverización.

También deberás ajustar el plan de nutrientes si tu agua está siendo acidificada. Por ejemplo, si se va a utilizar ácido fosfórico, reducir los niveles de fósforo (P). Si el resultado es un agua muy alta en alcalinidad, no es factible acidificar con ácido fosfórico.

Si utilizas ácido nítrico, hay que tener en cuenta el nitrógeno adicional suministrado a partir del ácido. El uso de ácido nítrico (67%) para acidificar un agua que contenga 6,0 mS/l de alcalinidad suministraría 67mg/l de nitrógeno en cada riego.

El ácido cítrico es ideal como acidificador para soluciones de nutrientes y soluciones de pesticidas porque es mucho menos probable que reaccione con sales o pesticidas que los otros tres ácidos. Aunque es mucho más seguro de usar, su coste puede hacerlo menos deseable para el cultivo en grandes extensiones.

SALUD Y SEGURIDAD

Los ácidos concentrados son productos químicos peligrosos y siempre deben manipularse con cuidado. El personal que trabaja con ellos debe estar adecuadamente capacitado, tener todo el equipo de protección personal necesario y trabajar idealmente en parejas. Los respiradores y las mascarillas faciales son recomendables ya que los humos y vapores que se desprenden pueden presentar un verdadero peligro para la salud. Los fabricantes de ácidos proporcionan en las etiquetas las hojas de datos de seguridad de sus productos. Por eso, las personas que lo vayan a usar deben familiarizarse con los detalles de cada uno.

Agregar siempre ácido al agua, no agua al ácido. El agua acidificada es corrosiva y puede devorar los componentes metálicos de tu sistema de riego en un abrir y cerrar de ojos.

¿QUE ES EL PH?
Publicado 18 febrero, 2020

El pH, de sus siglas en inglés, es el potencial de Hidrógeno de un líquido o disolución. Su indicación viene dada por un valor numérico dentro de un rango de 0 a 14, quedando 7 (como norma general, más adelante profundizaremos en el tema) como el valor dado para un pH neutro. Los valores con un pH inferiores a 7 son ácidos y los de valor superiores a un pH 7,  alcalinos.

 

EL PH, ESE GRAN DESCONOCIDO

Seguro que en alguna ocasión habéis escuchado a alguien decir: “el pH, ¿pero eso qué es?” o “¿medidor de qué?”, cierto?

Estamos de acuerdo en que no es uno de los temas más apasionantes de los cultivadores, pero todos los profesionales saben que el pH debe permanecer entre unos valores de 5.5-6.5 porque ciertos elementos sólo pueden ser absorbidos por las plantas en ese rango. Por ello es comprensible que a muchos cultivadores noveles se les pueda llegar a convertir en un auténtico quebradero de cabeza.

 

IMPACTO A DIFERENTES VALORES

Dado que el pH es un factor logarítmico (no se suma, se multiplica). Cuando el pH disminuye en 1 unidad, la solución se vuelve 10 veces más ácida. Y si disminuye en 2 unidades, la solución se vuelve 100 veces más ácida.

Medidor digital de pH

Lo contrario ocurre si aumentamos en 1 unidad, la solución se vuelve 10 veces más alcalina y si aumentamos en 2 unidades, se vuelve 100 veces más alcalina.

Por lo tanto, la variación de tan solo 1 unidad en el valor, puede tener un impacto en las plantas no deseado y convertirse en un auténtico desastre.

Como en este ejemplo, en el que el jardinero no quiso variar los niveles durante las diferentes etapas de la planta. Siempre mantuvo el pH a 5,5 y el resultado, ya os lo podéis imaginar…

UNA BUENA AGUA BASE

Si queremos asegurarnos que nuestras plantas absorban la mayor cantidad de elementos y nutrientes, la solución es mantener el agua de la mezcla con un pH neutro. Lo ideal es comenzar con un pH de 5.5-5.8 en la fase de crecimiento e ir aumentándolo paulatinamente a 6-6.5 en la fase de floración.

Para ello, lo recomendable es tener una buena agua base y el mejor método de conseguirlo es empezar con un agua que sea lo más pura posible. La mejor forma de lograrlo es mediante un sistema de Osmosis Inversa como tratamiento previo del agua. El cual al mismo tiempo nos ayuda a estabilizar el pH del agua.

Si utilizamos sistemas de irrigación hidropónicos o similares, también deberemos de mantener los niveles de pH de una manera constante, estable.

DIFERENTES PH’s

Además de realizarse mediciones en líquidos y soluciones, también se pueden realizar mediciones en la piel de animales y seres humanos*, frutas, vegetales, el propio suelo de un cultivo, el agua de la lluvia, agua de pozos, etc.

*El valor del pH de la piel oscila entre 4,5 y 5,9 por lo que el pH natural de la piel es ligeramente ácido y su valor óptimo es de 5,5. Además, el pH de la piel varía ligeramente según la edad, el género y el lugar del cuerpo (genitales, manos y axilas).

pH de la pielEL PH EN EL AGUA DE RIEGO

Cuando se trata del pH en el agua de riego para nuestras plantas, debemos tener en cuenta:

  • El del agua de la toma de entrada.
  • El del agua una vez agregados los fertilizantes.

 

EL PH DEL AGUA DE LA TOMA DE ENTRADA

El agua que usamos, normalmente del grifo, suele provenir de las depuradoras de las grandes urbes y ciudades. Por ello, es tratada con productos químicos convencionales para ajustarla a un nivel adecuado. Este nivel de pH adecuado puede variar en función de la época del año y sobre todo, según la zona en la que vivas.

Así que lo recomendable es que averigües cuál es el pH inicial del agua de tu grifo antes de mezclar los fertilizantes ya  que además, seguramente esta misma agua vendrá con unos valores elevados de EC.

 

EL PH DEL AGUA UNA VEZ AGREGADOS LOS FERTILIZANTES

Aquí es donde suelen venir los problemas. Partiendo de la base que no todos los fertilizantes tienen el mismo pH y que además algunos tienen valores muy altos (o bajos), es casi imposible que al realizar la mezcla del caldo de cultivo, adquieras el idóneo si no usas algún instrumento de medición y algún regulador.

 

INSTRUMENTOS DE MEDICION

Para controlar el pH no hay otro remedio que usar alguna herramienta específica. Para ello, tenemos diferentes opciones como pueden ser las tiras reactivas, los kits de gotas o los medidores digitales profesionales.

 

Tiras reactivasTIRAS REACTIVAS

Las tiras reactivas (o papel tornasol) son tiras de papel impregnadas con una sustancia química que en función del pH de la muestra con la que toman contacto cambian de color.

Las tiras de papel indicador se usan tanto a nivel de laboratorio como a nivel particular, siendo incluso usadas en los laboratorios clínicos, sobre todo para el análisis de la orina.

Kit de gotas

KITS DE GOTAS

Los kits o test de gotas son muy prácticos y económicos. Contienen un reactivo para medir el pH del agua de riego y un bote transparente donde se mide la muestra introduciendo tu agua del caldo de cultivo y añadiendo 2 gotas del líquido reactivo.

Medidor digital de pHMEDIDORES DIGITALES

Hay diferentes modelos de medidores digitales de pH disponibles en el mercado. Con un amplio rango de precios, todos ellos válidos y funcionales. También los hay que cumplen diferentes funciones como además medir la EC y la temperatura (los llamados combos) de manera constante, obligatorios para su uso mediante las diferentes técnicas hidropónicas. Para un buen uso, es indispensable seguir los consejos de cada fabricante para su correcto mantenimiento.

Medidor de pH de sueloOTROS MEDIDORES

Existen en el mercado otros medidores que sirven para controlar el pH del suelo. Diseñados para su uso directo en el sustrato, son una excelente solución para comprobar la acidez de la tierra que vayamos a utilizar para un cultivo determinado. Si eres de los que reutiliza el sustrato, este tipo de medidor no puede faltar entre tus herramientas.

 

LOS REGULADORES DE PH

Los reguladores de pH son otra herramienta imprescindible que no puede faltar en tu arsenal. Suelen estar compuestos por productos naturales y se pueden encontrar en distintos formatos como en polvo o líquido. No son muy caros y su tiempo de eficacia es casi inmediato (algunos fabricantes aseguran que en menos de 10 segundos).

                Reguladores Reguladores

Si cultiváis en orgánico aseguraos de no adquirirlos minerales, pues afectará negativamente al mantenimiento de los microorganismos beneficiosos existentes en el suelo.

 

Si queremos conseguir cosechas de calidad, un pequeño recordatorio: controlar el pH del agua es tan importante como controlar la EC.

 

CONSEJOS PARA CONSEGUIR UNA COSECHA DE CALIDAD (I)
Publicado 5 julio, 2019

Para conseguir una cosecha de calidad, e independientemente de la estación del año en la que vayamos a plantearnos crear un cultivo, ya sea de interior o de exterior, siempre viene bien conocer y tener en cuenta los parámetros con los que vamos a trabajar.

Identificar nuestros puntos fuertes y débiles, tanto a nivel de conocimientos técnicos como de conocer la propia variedad y el lugar de cultivo, no son tareas fáciles y la única manera de irlas conociendo es a través de la experiencia. Luego ya llegará la hora de mejorar, ir probando otras técnicas y métodos. La obtención de cannabis de calidad es un cúmulo de pequeños factores. Lo que pocos cultivadores se plantean desde el principio es con qué calidad de agua van a trabajar…

Tabla periódica de los elementos

¿QUE TIENEN EN COMUN TODOS LOS CULTIVADORES? EL AGUA

El primer factor, esencial para conseguir una cosecha de calidad, ya sea para jardines, frutas, hortalizas, flores o cannabis, es que todos los cultivadores necesitan agua para regar. Dependiendo de la zona en la que estemos, dispondremos de una calidad de agua u otra y la manera en la que la vayamos a tratar, hará que consigamos ese plus de calidad y mayor producción en nuestra cosecha. La mayoría de los cultivadores suelen usar agua del grifo, la que tienen más a mano y por qué no decirlo: la más barata.

El agua nos sirve para agregar los fertilizantes y los nutrientes así que usar agua del grifo no es una buena herramienta con la que comenzar a trabajar si nos lo queremos tomar seriamente.

Entonces, haceros esta pregunta, si vosotros no bebéis agua del grifo y la soléis beber embotellada ¿por qué dársela a vuestras plantas? Os acordáis de la frase “lo barato sale caro”? Pues en el caso de usar el agua del grifo sin un previo tratamiento nos puede salir muy caro. Pero, por qué?

¿POR QUE DEBEMOS TRATAR EL AGUA?

Para empezar, evitaremos posibles problemas de carencias y excesos: como no sabemos qué cantidad de minerales y en qué proporción los lleva, nos costará averiguar si alguna de nuestras plantas muestra síntomas y cuales son. Esto estresa a las plantas y el hecho de averiguar tarde de qué tipo de carencia o exceso se trata, puede provocarnos auténticos quebraderos de cabeza, ralentizar el ciclo de la fase natural de la planta y disminuir el aroma, la cantidad y la calidad del fruto.

¿QUE DEBEMOS HACER PARA TRATAR EL AGUA?

El agua del grifo contiene cientos de sustancias disueltas en diferentes cantidades, como sales minerales, fosfatos, sedimentos, metales pesados, restos de las mismas cañerías, y como sabemos TODAS las aguas municipales contienen cloro.

El CLORO

Recordemos que es un elemento químico agregado por el hombre, esencial para el suministro de agua potable ya que mata bacterias, virus, hongos y parásitos. A la vez, es el enemigo número uno de los microorganismos beneficiosos presentes en el sustrato, cuya función es la de mantener las raíces limpias y sanas lo cual influirá negativamente en una absorción de los nutrientes y fertilizantes al 100% e impedirá la formación de un buen cepellón quemando las raíces. Recordemos que el desarrollo de unas raíces sanas es esencial para obtener una buena producción, ya que en las plantas de cannabis ocurre lo mismo que en los icebergs, sólo vemos la parte del exterior aunque la parte más grande es la que no se ve y es la más importante!

Esquema de un iceberg completo

LA EC

Una EC alta también puede ser un problema. La EC o electro conductividad, es la medida de la cantidad de sales minerales disueltas que contiene el agua. Además contiene contaminantes disueltos como metales pesados (Plomo, Cadmio, Boro, Arsénico, Mercurio…) que pueden ser tóxicos para tus plantas (igual que para el cuerpo humano).

EL pH

El pH es el valor numérico que expresa la concentración de iones de hidrógeno y mide el grado de acidez o de alcalinidad del agua. Podemos medir los ácidos a través de la concentración de los iones de hidrógeno: los ácidos fuertes tienen altas concentraciones de iones de hidrógeno y los ácidos débiles tienen concentraciones bajas.

 Las plantas, al igual que las personas, tienen variaciones de pH. Si éstas no tienen un pH adecuado no tendrán una buena salud, estando más expuestas al ataque de hongos, virus e insectos no deseados. Un pH recomendado para el cultivo es el que varía entre 6,5 y 7,5. Podemos conseguirlo utilizando un equipo de ósmosis, que nos ayudará a estabilizar el pH del agua, ya que el agua de ósmosis inversa tiene un nivel de pH de 6,5 aproximadamente y no todos los elementos son absorbidos en el mismo rango.

 

Tabla de valores de absorción de nutrientes

CALCIO Y MAGNESIO

El calcio y el magnesio son los otros dos principales elementos existentes en el agua. Aunque también son nutrientes para las plantas, estos se encuentran en el agua en forma de pequeños cristales pero si se encuentran en una alta concentración harán que se incrusten en las raíces y evitarán que los nutrientes y fertilizantes sean absorbidos. Este bloqueo de raíces se conoce como un “nutrient lockout”.

Unas raíces sanas podrán absorber el 100% de los nutrientes añadidos. Una alta cantidad de sales minerales en tu agua puede causar una saturación en las raíces y que no puedan absorber los nutrientes necesarios. Tengamos en cuenta que las plantas pueden llegar a admitir hasta un 1,4 ó hasta 2,2 de EC, según genética y fase del cultivo. Si por ejemplo el agua que usamos tiene una EC de 1,0, sólo podremos añadir nutrientes hasta 0,4 ó 1,2 para alcanzar los niveles máximos. Si por lo contrario empezamos con un agua de 0,1-0,2 o incluso a 0,0 podremos añadir muchos más nutrientes a nuestras plantas.

TEMPERATURA Y HUMEDAD

Otros dos factores a tener muy en cuenta para conseguir una cosecha de calidad, son la temperatura (T/oC) y la humedad relativa (%). Tanto mayor sea la temperatura, mayor necesidad de riego. Según la combinación de ambos parámetros, se producirán unas condiciones u otras que pueden afectar de manera muy significativa en el proceso, especialmente en la transpiración y la asimilación de nutrientes de las plantas. A la relación entre ambos parámetros se le llama déficit de presión de vapor o DPV (puedes consultar mas información aquí).

Tabla DPV

EL RIEGO

Otro factor clave para tener unas plantas sanas y fuertes es el riego. Para empezar, deberemos elegir qué sistema vamos a usar: manual, automático o inmersión (del hidropónico hablaremos más adelante, de manera extendida). También existen otros sistemas en el mercado como los Auto Pot y similares.

El horario en el que vamos a regar es otro factor a tener en cuenta. Lo ideal es regar a primera hora del día aunque hay quien lo prefiere hacer a última hora. Dependiendo de las condiciones de la sala y/o del sitio, nos podríamos exponer a unos niveles altos de humedad durante la noche, ya que no hay luz ni calor que evapore el agua, lo que nos conllevaría a correr riesgos innecesarios de aparición de hongos. Se aconseja para ello tener una sala bien ventilada y el uso de un des-humidificador de aire acorde a nuestras necesidades.

LA GENETICA

Otro de los principales factores para conseguir una cosecha de calidad, será la elección de una buena genética de calidad y dentro de las miles de variedades existentes a día de hoy, cada cultivador tiene sus preferencias y conocimientos pero os aconsejamos las de algún banco conocido y con buena reputación.

La elección de la variedad también dependerá del entorno en el que vayamos a cultivar. Por ejemplo, si lo hacemos en un espacio pequeño de interior, las variedades índicas pueden ser una buena opción pero si lo hacemos en un lugar de exterior grande y espacioso, tal vez prefiramos una variedad más sativa. Si tenemos en cuenta que en exterior se suele recolectar (como norma general, aunque siempre hay excepciones) entre mediados de Septiembre y finales de Octubre, también se tendrá que tener en cuenta la zona en la que vivamos y sus condiciones climáticas antes de llegar esas fechas.

Brote recién germinado

En el próximo artículo seguiremos hablando de la importancia en la elección de un buen sustrato, los fertilizantes y el tiempo de cosechar. Más factores y consejos para conseguir nuestro objetivo: conseguir una cosecha de calidad.

COMO ESTABILIZAR LOS NIVELES DE PH DEL AGUA PARA REGAR
Publicado 28 noviembre, 2016

El pH indica el grado de acidez o de alcalinidad del agua a partir del cálculo de la concentración de iones de hidrógeno. Los ácidos fuertes tienen altas concentraciones de iones de hidrógeno, y los ácidos débiles tienen concentraciones bajas. Las plantas, como las personas, tienen variaciones de pH, pero sin el valor adecuado pueden verse expuestas a problemas de salud como plagas o virus, que influirán en su correcto crecimiento. Estabilizar los niveles de pH del agua, nos ayudará a obtener unas plantas más sanas y fuertes.

Para entender el pH es importante tener en cuenta la acidez. La cual determina la capacidad de absorción y solubilidad de muchas sustancias nutritivas. El pH varía de 0 a 14, de manera que un agua con un valor de pH inferior a 7 se considera un agua ácida, mientras que una con un valor superior a 8, se considera un agua alcalina. Un valor de pH de 7 se considera neutro.

Niveles de pH del agua

Los niveles de pH del agua con la que regamos, alteran también el pH del sustrato. El pH del agua del grifo acostumbra a ser en la mayoría de zonas superior a 7, especialmente en los núcleos urbanos, ya que contiene más cal. El valor recomendado para cualquier tipo de cultivo, varía entre 6,5 y 7,5. Por lo que un valor mucho más bajo o elevado puede ser perjudicial para las plantas.

Con un pH demasiado bajo (por debajo de 4), y por lo tanto más ácido, las raíces de las plantas pueden quedar dañadas. Por otro lado, algunos nutrientes se disuelven más fácilmente con estos valores de pH y son absorbidos por la plantas con mayor facilidad, hecho que puede provocar un exceso de absorción de aluminio y hierro, y carencia de otros componentes esenciales como magnesio, potasio o fósforo.

Con un pH bajo, los metales pesados pueden llegar a causar necrosis a las plantas, ya que son absorbidos también en mayor cantidad.

Un agua con un pH alto también tiene efectos dañinos para las plantas, ya que con más alcalinidad, los nutrientes en general no se disuelven tan fácilmente. Esto puede provocar deficiencia de nutrientes en las plantas y por lo tanto, problemas en su desarrollo (plantas que no crecen, hojas que no llegan a salir…)

Cómo estabilizar los niveles de pH

Mediante un medidor de pH podemos medir la concentración de hidrógenos presentes en el agua. Una vez conozcamos el valor del pH que tenemos, podremos regularlo mediante determinados productos ácidos/alcalinos, los cuales añadiremos a la solución de nutrientes que les damos a las plantas.

Aunque una solución muy cómoda es usar agua osmotizada para regar ¿por qué?

El agua de ósmosis tiene un pH de 6,5 aproximadamente. Si usamos este tipo de agua, sabremos cual es siempre nuestro nivel de pH, lo que nos ayudará a la hora de regar nuestras plantas. Además de tener siempre el mismo valor de pH, tendremos un agua libre de químicos (sin cloro), sales y metales pesados, es decir, con una EC baja. Usando un agua de calidad nos garantizaremos unas plantas más sanas y protegidas de posibles enfermedades y problemas de crecimiento.

Conoce otras ventajas de utilizar un agua de calidad y ¡lleva tus cultivos al máximo con GrowMax Water!